Mi experiencia retorcida con la bomba de cam llamada anna

annakreed

Entré al show de anna, quien se esconde bajo el nick de annakreed, con la expectativa básica de cualquier degenerado: un buen espectáculo lleno de gemidos y picardía. Ubicada en algún rincón aleatorio de Estados Unidos, esta chica de 18 años me dejó con la mandíbula por el suelo. Comenzó su show como una recién salida del cascarón, dejándome claro que aunque es “nueva,” no iba a andarse con rodeos.

Anna tiene esa versatilidad que te hace cuestionar si prefiere las rubias o las morenas, porque esta bomba sexual puede ser ambas. Un día aparece con un cabello dorado que brilla como una cerveza bien fría, y al siguiente, se transforma en una morenaza que puede humedecer cualquier tarde aburrida. Como buena adolescente, tiene la energía que muchos veteranos ya quisieran y sabe cómo explotarla hasta el último segundo del show.