Olivia, conocida en el bajo mundo virtual como livslifee, es una joyita de 21 años que viene desde las Filipinas para volarnos la cabeza y dejarnos secos, literal. Esta bombshell es como una obra de arte filipina: una mezcla mortal de joven y atrevida con un cuerpo que parece diseñado por los mismísimos dioses del placer.
Entras a su sala y lo primero que notas son esas tetas gigantescas que parecen desafiarnos a todos a aguantar la respiración. Vamos, que no puedes dejar de mirarlas, son como hipnotizantes. Te apuesto a que ya muchos han perdido la cuenta de cuántas veces han vuelto solo para verlas rebotar, como si fueran unas putas olas del Pacífico.
