Entras en el cuarto de LUNA y es como ser abofeteado por la fantasía más oscura de tus sueños húmedos. Esta morena lleva lo de “goth” a un nivel que haría que Hades se lo pensara dos veces antes de invitarla a una fiesta. Con tetas que desafían la gravedad, LUNA es la viva imagen de esa diosa asiática que creías que solo existía en animes de mierda.
No hay nada más jodidamente inquietante que verla fingir un orgasmo con su estúpido ahegao. Algunos dirían que parece poseída, otros que es puro arte. Lo que está claro es que mientras tú te preguntas si necesitas un exorcismo para el ordenador, ella está haciéndote el débil intento de despejar esa senda de celibato que has mantenido sin querer.
