Millie, esa chiquilla de 19 años que se ha convertido en una auténtica diosa del placer visual desde el culo del mundo, Auckland, Nueva Zelanda. Si buscas una experiencia auténtica y sin filtro, esta es la señorita a la que debes seguir. No es solo otra cara bonita en la industria; es joven, y eso le da ese atractivo prohibido que a muchos les sube la temperatura.
Tiene unas tetas naturales tan grandes que podrías vivir entre ellas y nadie se daría cuenta. Es como si la naturaleza hubiera decidido hacer una obra maestra del erotismo con Millie. Ya sea que esté tocándose suavemente o rebotando esos melones en la cámara, siempre hay algo hipnotizante que no te deja apartar la vista. En su cuarto, las reglas son simples: disfruta y déjate llevar. Es nueva, pero actúa con la seguridad de una veterana, como si hubiera nacido para esto.